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Ministerio de Hacienda
La autonomía económica de las mujeres es uno de los principales motores para avanzar en la reducción de la desigualdad. Aumentar la participación laboral, promover el trabajo decente, asegurar la igualdad salarial y generar las condiciones para que ellas asuman roles de liderazgo son tareas ineludibles en la búsqueda de esa autonomía.
Los acontecimientos de los últimos años, que incluyen la pandemia por COVID-19 y las múltiples crisis que provocó a nivel global, han afectado directamente cada una de estas dimensiones. En Chile, la participación laboral de las mujeres retrocedió casi una década durante el periodo más álgido de la pandemia[1] y se ha recuperado a un ritmo menor que la de los hombres. Las mujeres continúan registrando mayores grados de informalidad[2] y se concentran en empleos más vulnerables y de menores ingresos, debido a la persistente segregación en el mercado del trabajo que restringe su acceso a posiciones de liderazgo (segmentación vertical) y en sectores económicos peor remunerados y con mayores niveles de precariedad, usualmente asociados a labores de cuidados, como la salud, la educación y el trabajo doméstico remunerado (segmentación horizontal). Además, la pandemia profundizó el tiempo y la intensidad del trabajo de cuidados que realizan las mujeres al interior de los hogares, en ocasiones con efectos que perduran hasta el día de hoy.
Esta mayor carga de trabajo, además de afectar la posibilidad de tener un empleo, puede incidir en la capacidad de las mujeres de asumir roles de mayor responsabilidad en sus ocupaciones. La situación seguirá siendo crítica si las empresas y organizaciones no asumen una lógica de corresponsabilidad social para diseñar jornadas laborales que consideren la realidad de las necesidades de cuidados de los hogares.
El Gobierno del Presidente Gabriel Boric tiene un sello feminista, lo cual se refleja en el compromiso con la incorporación transversal de la mirada de género en el diseño de las políticas públicas, para mejorar la calidad de vida de las mujeres que viven en nuestro país. Con este objetivo, propusimos una Reforma Tributaria y una Reforma del Sistema Previsional que buscan reducir las brechas de género presentes en el mercado laboral y reconocen el trabajo de cuidados. Hemos diseñado medidas de alivio y de reactivación económica con especial foco en las poblaciones más afectadas, como las mujeres y las personas jóvenes. Y también se retomó el trabajo de la Comisión Asesora para la Inclusión Financiera, que tendrá un importante rol en la promoción del bienestar financiero y la inclusión económica de las mujeres.
Junto al Ministerio de Economía, Fomento y Turismo y el Ministerio de la Mujer y Equidad de Género, en 2022 presentamos al Congreso el proyecto de ley “Más Mujeres en Directorios”, que busca aumentar gradualmente su participación en directorios de empresas abiertas y especiales.
Además, junto al Ministerio de Economía, Fomento y Turismo y el Ministerio de la Mujer y Equidad de Género, en 2022 presentamos al Congreso el proyecto de ley “Más Mujeres en Directorios”, que busca aumentar gradualmente su participación en las mesas directivas de empresas abiertas y especiales. Esta iniciativa, además, pretende asegurar la representación de sus voces y experiencias en la toma de decisiones, que no son sólo necesarias sino también beneficiosas para las firmas y las personas que trabajan en ellas.
Este informe constituye un valioso aporte para analizar las brechas de participación laboral y de representación en los espacios de toma de decisión en Chile. De manera muy importante, junto al análisis de las entidades que reportan a la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), esta cuarta versión incluye una comparación de los indicadores de las empresas privadas y las públicas. Este esfuerzo aporta en la identificación de los avances y desafíos en este segmento específico, para articular respuestas que atiendan de manera integral la evolución de las brechas y desigualdades de género en el mercado laboral.
Los resultados indican que aún queda mucho camino por recorrer. Avanzar hacia mayores niveles de igualdad al interior de las empresas públicas y privadas, y fomentar la autonomía económica de las mujeres son tareas que requieren del trabajo articulado y colaborativo del Estado, el sector privado y la sociedad civil.
Desde nuestro rol como autoridades entendemos que la igualdad de género no sólo es importante, sino que es una condición necesaria para caminar hacia un país con mayores niveles de desarrollo, que entregue seguridad y que mejore sustancialmente la calidad de vida de las personas.
Mario Marcel
Ministro de Hacienda
Claudia Sanhueza
Subsecretaria de Hacienda
Ministerio de Economía, Fomento y Turismo
Nuestro país enfrenta desafíos importantes en términos de productividad. De acuerdo con la Comisión Nacional de Evaluación y Productividad en su informe anual más reciente (2022), desde el año 2000 se ha constatado una desaceleración sostenida de la productividad en Chile, con una contribución al crecimiento promedio anual de tan solo 0,1%. Esto tiene importantes repercusiones en la capacidad del país para la generación de empleo decente y limita la capacidad del Estado de generar ingresos de calidad para financiar un catálogo de derechos que aseguren que ningún grupo de la población quede atrás.
Sabemos que para aumentar la productividad y generar mejores condiciones para toda la población, es necesario que las mujeres puedan ser autónomas económicamente, no solo mediante su participación en el mercado laboral, sino también mediante un rol activo en la organización empresarial. Existe evidencia que muestra que la incorporación de las mujeres en el mercado laboral tiene una relación positiva con los niveles de productividad, gracias a una mayor diversidad en los equipos de trabajo y puestos de dirección.
En este contexto, como Gobierno tenemos la convicción de que para impulsar la productividad del país y consolidar un desarrollo productivo sostenible, es necesario generar iniciativas conjuntas que garanticen condiciones de justicia e igualdad en el mercado, disminuyendo las barreras de acceso y de desarrollo pleno, como la carga de cuidados o las oportunidades limitadas para participar igualitariamente en espacios de toma de decisión económica.
Esto se refleja en nuestro proyecto de ley de “Más Mujeres en Directorios”, presentado junto al Ministerio de la Mujer y Equidad de Género y el Ministerio de Hacienda, el cuál es fruto de un estrecho diálogo con empresarias y empresarios para incrementar los derechos de las mujeres avanzando en los distintos espacios de poder.
De igual forma, esta nueva versión del Reporte de Indicadores de Género en Empresas no sólo nos entregará estadísticas de género sólidas que permitan visibilizar desigualdades para formular, monitorear y evaluar de mejor manera las políticas públicas que impulsamos; sino que también nos ayudará a conocer en concreto el avance de las mujeres en las empresas. Además, por primera vez el reporte incluirá un capítulo especial para empresas públicas que reportan a la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), lo que se traduce en la información de 23 firmas del Estado y su avance en términos de igualdad de género. Esto impulsará la promoción de las mejores prácticas de gobierno corporativo, no sólo en términos de sostenibilidad, sino que también de igualdad entre hombres y mujeres en el sector público.
Avanzar hacia la igualdad de género dentro de las empresas y en los puestos donde se toman las decisiones no es solo un tema de justicia, sino que es una política que va en línea con los desafíos productivos que tiene nuestro país.
Nicolás Grau
Ministro de Economía, Fomento y Turismo.
Javiera Petersen
Subsecretaria de Economía y Empresas de Menor Tamaño
Fundación ChileMujeres
Por cuarto año consecutivo realizamos de forma colaborativa el Reporte de Indicadores de Género en las Empresas en Chile, el más amplio de nuestro país, gracias al deber de reportar de las empresas y a la información pública entregada por la Norma de Carácter General No 386 de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) sobre responsabilidad social y desarrollo sostenible.
Este año, es muy significativo porque se transforma en una política pública que logra trascender a una nueva administración. Nuestras palabras son de agradecimientos al Gobierno anterior por haberlo comenzado a realizar junto a Fundación ChileMujeres y al actual Gobierno por haber aceptado continuar, sumándose al Ministerio de Hacienda y a la Comisión para el Mercado Financiero (CMF)el Ministerio de Economía, Fomento y Turismo. Gracias al Ministro Mario Marcel, al Ministro Nicolás Grau, y a la presidenta de la CMF, Solange Bernstein, por la voluntad, demostrando la transversalidad de un tema de justicia tan esencial como son las posibilidades laborales para las mujeres, factor básico de autonomía, libertad y dignidad, en un país con el dolor de que menos de la mitad de las mujeres pueden acceder a un trabajo remunerado.
Agradecemos a la CMF por toda la ayuda con la información, entre tantos otros apoyos. Y a los equipos de trabajo de los ministerios de Hacienda y de Economía, por el valor agregado que le dieron, logrando mejoras y enriquecimiento de la información.
Este año el reporte, además, cuenta con el apoyo de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), por lo que agradecemos especialmente a Fabio Bertranou, Director de la Oficina de la OIT para el Cono Sur de América Latina.
No obstante estas buenas noticias, este reporte muestra que hay sólo un pequeño avance en la presencia de mujeres en gerencias de primera línea y directorios, y un pequeño retroceso en la participación de mujeres en las organizaciones, lo que demuestra la necesidad de establecer acciones que impulsen la mayor diversidad de género en todos los niveles.
Las y los invitamos a conocer los indicadores de participación de mujeres en las organizaciones, en la gerencia de primera línea y en el directorio, y las brechas salariales que las empresas reportan a la CMF. Todo, a nivel general, por rubro e individualmente por empresa.
¡Bienvenidas y bienvenidos al cuarto Reporte de Indicadores de Género en las Empresas en Chile!
Francisca Jünemann
Presidenta Ejecutiva Fundación ChileMujeres
Angélica Guerra
Directora de Administración y Desarrollo Fundación ChileMujeres
Organización Internacional del Trabajo (OIT)
América Latina y el mundo en general han realizado múltiples avances en el camino hacia la igualdad de género en el trabajo. Estos progresos, sin embargo, requieren ser acelerados urgentemente en la medida que los indicadores salariales, de formalidad, de segregación ocupacional y de balance trabajo-familia todavía presentan cifras y realidades preocupantes.
Nuevamente somos testigos y protagonistas de momentos particulares. Las consecuencias que deja la pandemia, el avance tecnológico y digital, el aumento de la esperanza de vida de la población, el cambio climático y la globalización, junto a situaciones estructurales de informalidad, desigualdad, pobreza y baja productividad, marcan la agenda del presente y del futuro del trabajo.
En este escenario, la situación de las mujeres en el mundo del trabajo y de la igualdad de género requiere nuestra especial atención. La discriminación por motivos de género constituye una de las formas de desigualdad injustificables, siendo una situación que atenta contra la posibilidad de construir sociedades más prósperas, justas y cohesionadas.
Este cuarto Reporte de Indicadores de Género en las Empresas en Chile 2022 es un instrumento valioso que nuevamente pone en evidencia la importante brecha que aún persiste en el país para alcanzar la paridad en los lugares de trabajo, invitando a las empresas a abrir espacios de reflexión sobre cómo mejorar el desarrollo de las mujeres, fortalecer los procesos de selección sin sesgos, la adaptabilidad laboral y la corresponsabilidad parental en los lugares de trabajo.
Para la OIT, la igualdad de género es un objetivo prioritario y transversal a todas sus acciones, ya sea en las actividades de la Organización con sus constituyentes tripartitos como en los documentos e informes que aportan conocimiento y en los instrumentos de su sistema normativo.
Así, la igualdad de género forma parte también de la “Declaración del Centenario de la OIT para el Futuro del Trabajo” de 2019, adoptada por representantes de gobiernos y de organizaciones de empleadores y de trabajadores. Allí se exhorta a los 187 Estados Miembros de la OIT al “logro efectivo de la igualdad de género en materia de oportunidades y de trato”.
La Declaración propone, asimismo, “lograr la igualdad de género en el trabajo mediante un programa transformador”, que: (I) asegure la igualdad de oportunidades, la participación equitativa y la igualdad de trato, incluida la igualdad de remuneración entre mujeres y hombres por un trabajo del mismo valor; (II) posibilite una repartición más equilibrada de las responsabilidades familiares; (III) permita una mejor conciliación de la vida profesional y la vida privada, de modo que los trabajadores y los empleadores acuerden soluciones (inclusive en relación con el tiempo de trabajo) que tomen en cuenta sus necesidades y beneficios respectivos; y (IV) promueva la inversión en la economía del cuidado.
Tanto la Declaración del Centenario de la OIT para el Futuro del Trabajo como los planes de trabajo a nivel de país, constituyen tanto la hoja de ruta estratégica como los planes de acción que desde la OIT impulsamos para que un futuro con trabajo decente para todos y todas se haga realidad.
Fabio Bertranou
Director Oficina de la OIT para el Cono Sur de América Latina
Comisión para el Mercado Financiero (CMF)
La Comisión para el Mercado Financiero (CMF) tiene la responsabilidad de velar por el correcto funcionamiento, desarrollo y estabilidad del mercado financiero chileno. Con ese fin y junto con la regulación y supervisión de las diferentes actividades financieras, promovemos que esas empresas tengan una gobernanza conectada con su entorno y capaz de liderar los cambios necesarios para su viabilidad futura. Para esto, la evidencia internacional ha venido mostrando en forma consistente que es clave la diversidad en los directorios y en el conjunto de la organización.
La CMF también establece los estándares de información que las empresas deben entregar públicamente, para que inversionistas y público en general puedan tomar decisiones informadas. Así, desde hace más de dos décadas, como regulador comenzamos a entregar información desagregada por género aportada por las industrias que fiscalizamos.
En lo más reciente, hemos venido elevando estos estándares de divulgación. En 2015 emitimos dos normas (N° 385 y 386) para que los emisores de valores incluyeran en sus memorias anuales un Reporte de Responsabilidad Social y Desarrollo Sostenible con indicadores de diversidad y brecha salarial por género. Gracias a esta información, la realidad sobre la presencia femenina al interior de las empresas logró mayor visibilidad. Ejemplo de ello es lo señalado en este reporte, elaborado por cuarto año consecutivo con información consolidada por la CMF, y que nos revela que en el período 2019-2022 la participación total de mujeres en las firmas transadas en bolsa está cerca del 40%.
Como complemento, el último Informe de Género en el Sistema Financiero publicado por nuestra Comisión mostró diferencias relevantes entre las diversas industrias fiscalizadas en esta materia. Mientras en las compañías de seguros y en las empresas más transadas en la bolsa existe un crecimiento sostenido de la participación de mujeres en puestos directivos, que les permitiría alcanzar la paridad en un horizonte de 6 años; otras firmas exhiben retrocesos en el cierre de brechas e incluso en la industria bancaria la equidad de género se lograría en poco más de dos décadas, al ritmo de avance actual.
Un nuevo paso en materia de información lo constituye la norma N° 461, emitida en 2021, la que exige divulgar información social, medioambiental y de gobiernos corporativos de forma integral en las memorias anuales, siguiendo así la ruta de economías más desarrolladas. Esta normativa considera que las políticas en materia de sostenibilidad pueden tener impactos materiales en el desempeño de las compañías y, por ende, en las decisiones de los inversionistas.
Ya que su aplicación es gradual, el primer reporte lo entregarán los emisores de valores de mayor tamaño el 31 de marzo de 2023 y el resto en 2024; y para 2025 también deberán reportar bancos, compañías de seguros y administradoras generales de fondos. De este modo, se conocerá mayor información sobre diversidad, incluyendo el número de personas por sexo, nacionalidad, rango de edad, antigüedad laboral y situación de discapacidad. También se perfeccionan los indicadores de brecha salarial y se incluye información sobre las políticas de equidad y de corresponsabilidad parental, entre otras.
Como Comisión, seguiremos consolidando información sobre la diversidad en las entidades financieras, para enriquecer el debate público y contribuir al análisis y diseño de políticas públicas orientadas a reducir las brechas de género en nuestra economía.
Solange Berstein
Presidenta Comisión para el Mercado Financiero
[1]La participación laboral de las mujeres pasó de un máximo histórico de 53,3% en el trimestre noviembre-enerode 2020 a 41,2% en el trimestre abril-junio de ese año. Fuente: Instituto Nacional de Estadísticas (2021) Género y empleo: Impacto de la crisis económica por COVID-19
[2] La tasa de ocupación informal para el trimestre móvilo ctubre-diciembre 2022 alcanzó 26,5% en hombres y 28,5% en mujeres. Fuente: Instituto Nacional de Estadísticas (2023) Boletín Estadístico: Empleo trimestral. Edición N°291, 30 de enero de 2023.